El saxofonista Andrés Boirasky brindó una clínica de jazz para los alumnos de la escuela, el pasado martes 10 de septiembre. Al comenzar el encuentro el músico que desde hace casi 30 años reside en Nueva York, destacó que su objetivo era lograra que los alumnos escucharan "ideas distintas" vinculadas al jazz  y a la música.

Boirasky recordó sus inicios en el jazz de la mano de la figura ineludible de Dizzy Gillespie, cuya influencia fue fundamental para que se iniciara en el mundo del jazz . Si bien no formó parte de la banda cuando el mítico músico la integraba, Boiarsky sí integró la orquesta que lleva su nombre con posterioridad. "Cuando lo escuché dije, esto es música marciana", mencionó Boiarsky sobre la primera vez que lo escuchó en vivo en Argentina, en los 70.

Antes de compartir el escenario con divresos ensambles de alumnos, el músico mencionó algunas percepciones sobre la música y la carrera profesional. "Hoy estar desinformado es un pecado, tienen que hacer el trabajo de informarse, de conocer y saber de música" subrayó el saxofonista, que fue director de la orquesta de Lionel Hampton y también tocó en la United Nations, que dirigía Paquito D'Rivera.

Durante el encuentro Boirasky también destacó que la música está vinculada a un aprendizaje "de por vida", en especial el jazz "que es un idioma". "La música nunca se termina de aprender; uno nunca se gradúa de la música", dijo y al respecto agregó que "hay que estar siempre curiosos, buscando y escuchando": A su vez, señaló que "uno es lo que escucha", y por lo tanto hay que estar abiertos a escuchar cosas distintas, investigar, y dejarse influenciar.

El músico se formó en el Royal College of Music de Londres, en Inglaterra, vivió también en Nueva York y en China; participó de muchas grabaciones entre las cuales figuran las que realizó con el trombonista Slide Hampton, Claudio Roditi, The Dizzy Gillespie Alumni All-Stars, The United Nation Orchestra, Lionel Hampton, Nancy Wilson, Paquito D'Rivera, Al Di Meola, entre otros.

Dos ensambles integrados por alumnos de la escuela subieron al escenario. Luego de escuchar sus presentaciones Boirasky ofreció algunos consejos. "Hay que estar atentos a lo que hace el solista, hay que escuchar, estar inmersos, tienen que escucharse entre ellos; el bajista y el baterista tienen que estar unidos, que la sesión rítmica esté unida", remarcó el músico.

La clínica fue un verdadero lujo para todos los alumnos que participaron del encuentro, ya sea desde el escenario, donde pudieron recibir consejos y tips de Boirasky, como también para el resto de los alumnos que se acercaron el auditorio de Ciudad de la Paz para escuchar a uno de los saxofonistas más reconocidos del jazz internacional.





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